Finalmente ha decidido dar el paso para convertirse en un trabajador en línea. ¡Felicitaciones! Usted ha tomado conciencia de que estamos en una nueva era y que la tecnología definitivamente está modificando nuestras vidas para mejor.
Sin embargo, conseguir insertarse en un mercado laboral con nuevas características no es tan sencillo, en especial para los pertenecientes a las generaciones que no nacieron inmersos en la corriente tecnológica como los llamados Millennials y Centennials. Nos referimos a la generación X (nacida entre 1965 y la década de los ochenta) e incluso los Baby Boomers que todavía están activos laboralmente (nacidos desde el final de la Segunda Guerra Mundial hasta 1964).
Por eso, el primer paso es tener una idea de la variedad de puestos disponibles, tomar conciencia de las habilidades con las que cuenta y sus intereses personales, así como saber si el trabajo a distancia puede funcionar en la localidad donde usted se encuentra (con esto nos referimos a los sistemas de pago y a las leyes internacionales y locales de cada país).
En todo caso recuerde el aumento desmesurado de teletrabajo que ha surgido en estas últimas décadas y la gran cantidad de recursos disponibles en línea.
Por otra parte, hay que tomar en cuenta otros aspectos al momento de iniciar la aventura del trabajo a distancia:
Tener todo lo necesario para trabajar desde casa
El ordenador a partir de este momento se va a convertir en su principal herramienta de trabajo. El uso que le dará a desde ahora será mucho mayor al de cualquier computador del hogar, donde los niños hacen las tareas y usted ve una película por Netflix o revisa cada noche sus redes sociales. Por ello es recomendable evaluar si su máquina cuenta con las características de sistema idóneas para trabajar: procesador, disco duro, memoria, velocidad de Internet, entre otras.
Dónde estará ubicado su computador, y por lo tanto su estación de trabajo, también es importante. Debe ser un lugar apartado de los otros habitantes de la casa, o al menos donde pueda permitirse silencio y privacidad para concentrarse. También es necesario que todos los componentes útiles estén presentes e interconectados de manera cómoda: escáneres, impresoras, otras computadoras o monitores en caso de necesitarlos, teléfonos inteligentes, etc.
Los muebles, la iluminación y ventilación de su estación de trabajo deben estar adaptados a sus funciones. Una banqueta sin espaldar es totalmente inadecuada para trabajar durante largas horas al día, así como una luz que no beneficie la vista. Si en un primer momento no puede financiar estas modificaciones, intente adquirir prestado un mobiliario ergonómico que proteja su salud hasta que pueda comprar el propio.
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Hacer hincapié en sus habilidades
No se obligue a realizar un trabajo online con el que no se sienta a gusto, solo por creer que es mejor remunerado que otros, porque sus conocidos o las redes sociales hablan de sus beneficios. Solicitar un puesto que no se ajusta a sus potencialidades solo le garantizará que terminará odiando la decisión de trabajar desde casa.
Las solicitudes excesivas o con las que no está de acuerdo (varios trabajos en uno, actividades no inherentes al cargo y similares) son una señal de que no es un trabajo para usted.
¿Usted no es una persona de largas conversaciones, y mucho menos telefónicas? Entonces un puesto en servicio de atención al cliente no es la mejor. Trabajar con público incluso a distancia requiere un nivel de socialización y tolerancia bastante alto.
¿Las redes sociales le parecen un mundillo de chismes e información irrelevante? No piense en ofrecer sus servicios como community manager.
En cambio, si a usted le encanta viajar, o ha conocido muchos lugares en su vida, piense en llevar un blog para una empresa de turismo, ser un consultor turístico a distancia o convertirse en un escritor de viajes. De esto modo combinará su pasión por el mundo con un trabajo a distancia y remunerado que incluso le permitirá seguir visitando destinos mientras trabaja.
La Administración es una carrera que ha pasado sin dificultad al mundo del teletrabajo. Los documentos pueden ser enviados online y procesados por el empleado en su casa sin grandes requisitos más allá de una buena conexión a Internet y tener instalados los programas requeridos.
¿Es usted profesor de alguna materia, o es bueno enseñando algún oficio? Existen cientos de empresas que le pagarán por ser tutor en línea… También puede convertirse en un creador de tutoriales de enseñanza y subirlos usted mismo a la Red. Por supuesto, para lograr remuneración este camino es un poco más largo (debe profesionalizarse en sus videos, conseguir un número importante de seguidores a quienes vender luego sus cursos), pero si tiene interés por el mundo audiovisual y pasión por la enseñanza, además de ganas de convertirse en una figura pública, terminará disfrutando ampliamente este nuevo trabajo.
Recuerde que para laborar en línea no necesita tener educación superior, solamente estar familiarizado con el mundo de la tecnología, incluso de modo intuitivo. ¿Sabe manejar un correo electrónico? ¿Disfruta de las redes sociales? ¿Sabe hacer búsquedas en línea? ¿Tiene conocimientos básicos de plataformas como Windows, Mac o el software libre? Entonces puede realizar búsquedas de trabajo a distancia.
Por ejemplo, ¿es bueno y rápido transcribiendo audios o copiando información? Esta área tiene amplia demanda en Internet, así que no dude en probar suerte como transcriptor a distancia.
¿Habla dos o más idiomas adecuadamente? Por Internet hay miles de clientes necesitando desde transcripciones de escrituras personales hasta compañías de cine que requieren versionar sus películas en otro idioma.
Las posibilidades son casi infinitas. Empiece por hacer una lista de sus conocimientos y recursos personales y a partir de ahí inicie sus pesquisas de trabajo, tanto en los buscadores como en los cientos de páginas dedicadas a ofertar empleos.
Evitar caer en estafas
Como ya se mencionó, el trabajo online es un universo de posibilidades. Pero recuerde que donde está involucrado el poderoso señor Don Dinero, los profesionales de la estafa también están presentes.
No todas son tan obvias como los correos electrónicos con ofertas imposibles, ni crea tampoco que los jóvenes Millennials y Centennials están exentos de ser estafados. Por el contrario, su confianza en la tecnología los lleva a ser más incautos que las personas de más de cuarenta.
Una forma muy sencilla de ser engañado es cuando el potencial empleador solicita una prueba de trabajo, generalmente no remunerada y bastante completa. Frente a una oferta tentadora, el trabajador se arriesga a probar y luego el supuesto contratante alega no estar interesado en sus servicios o que no superó la prueba de selección, pero el trabajo ya fue entregado, siendo susceptible de convertirse gracias a algunas modificaciones en propiedad intelectual del estafador.
¿Cómo evitar este riesgo? Acepte solo pruebas cortas y remuneradas. Si el cliente en verdad quiere contratar a alguien, obtendrá toda la información que necesita del trabajador en una entrevista (telefónica, por chat o videoconferencia) y solo si considera su potencial lo invitará a realizar una prueba comprobatoria de esas habilidades.
Cuando busque trabajos remotos, sospeche de lo siguiente: propuestas demasiado tentadoras; se le pide dinero por adelantado para ingresar al trabajo; aparece poca o ninguna información comprobable del cliente; el aviso está mal redactado y no ha sido actualizado en mucho tiempo (o no hay datos temporales disponibles); el correo electrónico parece personal o no-corporativo.
Recuerde verificar al contratante a través de los buscadores de Internet. Si es un estafador conocido, seguro aparecerán opiniones e historias negativas de sus víctimas.
También realice búsquedas de trabajo en páginas reconocidas. Estos sitios cuidan su reputación y es difícil que sean utilizados para lanzar ofertas engañosas. Muchas de ellas, además, funcionan como intermediarios de los procesos de pago, lo cual es una garantía para usted.
En general, la mejor herramienta para evitar ser víctima de una estafa online es cierta dosis de escepticismo a la hora de buscar trabajo. De todos modos, no deje que el miedo lo disuada: un gran número de personas está consiguiendo una mejor calidad de vida e independencia financiera a través del trabajo en línea. ¡Usted también puede lograrlo!