Consejos para una entrevista de trabajo
Esta es una serie de tres videos que voy a hacer acerca de cómo vencer el miedo en las entrevistas.
Muchas personas me preguntan qué pueden hacer para vencer el miedo y la ansiedad durante el proceso de las entrevistas.
Recuerdo que en varias oportunidades que me sucedió que estuve desempleado, cuando iba a las entrevistas, el nivel de estrés era altísimo porque, especialmente cuando no tenemos un empleo, nuestra vida prácticamente depende de esa entrevista, nuestras finanzas, todo, absolutamente. Así que si quieres saber cómo puedes dominar el miedo, cómo puedes desarrollar una confianza absoluta en el proceso de entrevistas, vas a querer ver todo este video.
Para quienes no me conocen, mi nombre es Elvis D Beuses y soy el autor del best-seller internacional Cómo vencer el miedo y fundador de Alcanza tus Sueños (www.alcanzatussuenos.com) y mi misión es traerte las herramientas necesarias para que vivas la vida de tus sueños.
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No sé si algunos de ustedes recordarán algún episodio como este cuando estaban en la escuela, si alguna vez llegaron a tomar un examen sin haberse preparado: tal vez se nos olvidó estudiar, tal vez estuvimos ocupados jugando y llega ese desagradable momento en que tenemos que presentar un examen sin saber las respuestas.
Es una experiencia muy pero muy similar a la que experimentamos cuando estamos en el proceso de las entrevistas.
Ahora, bien, vamos a ver el otro lado de la novela:
¿recuerdas algún episodio donde tenías un examen y estudiaste muchísimo y revisaste las preguntas, las respuestas todas te las sabías, y a lo mejor estabas con algún adulto que te ayudaba, te interrogaba, y una y otra vez todas las respuestas las sabías con seguridad?
Cuando llegaste a tomar el examen al otro día, ¿cómo te sentías?
Yo sí me acuerdo de esa experiencia.
Me sentía con mucha confianza, no solo con confianza, no me sentía nervioso, sino que además me sentía entusiasmado por tomar el examen. De hecho, recuerdo en una oportunidad que al profesor casi se le olvida y yo le dije: “Profesor, ¿pero hoy no tenemos el examen?”, ¡porque yo quería tomar ese examen!
Claro, mis compañeros de clase casi me matan, pero esa es realmente la diferencia entre las dos experiencias y lo interesante es que podemos llevar esta correlación a las entrevistas de trabajo.
Así que ¿cómo podemos desarrollar esa confianza?
Muy fácil: tal como lo hicimos cuando éramos niños, sencillamente preparándonos para el proceso.
Lo primero que tienes que hacer es recolectar tantas preguntas como puedas. Ve a Google y empieza a hacer una búsqueda acerca de cuáles son las preguntas más frecuentes efectuadas durante el proceso de la entrevista. Especialmente, si puedes encontrar preguntas relacionadas a tu industria, mucho mejor.
Trata de tener una lista de por lo menos 200 preguntas.
El segundo paso que vas a hacer es empezar a redactar una por una tus respuestas en particular a cada una de esas preguntas.
Y el tercer paso va a ser practicar las respuestas.
En las respuestas que requieran algún tipo de ejemplo debes utilizar la metodología SAR, es decir, Situación, Acción y Resultado.
Es decir, si, por ejemplo, una de esas preguntas es:
¿me puedes compartir alguna experiencia en el último año donde tuviste problemas con un cliente?
¿Qué hiciste y qué sucedió?, pues la respuesta debe ser Situación, Acción y Resultado.
Puedes dar el ejemplo: “Sí, tuve una situación donde le entregamos una orden a un cliente y el cliente se molestó. Mi acción fue ir ahí. Le hice la promesa de que nunca más iba a suceder, le di mi teléfono para que me llamara directamente y hacerle seguimiento a sus órdenes. Y el resultado fue que ese cliente volvió a hacer los pedidos tal cual y como lo hacía en el pasado”. Algo así. Algo sencillo. Obviamente, es muy importante que lo que tomes para utilizar la técnica SAR tenga un final feliz, un resultado positivo.
En mi experiencia, cuando hacemos esto, cuando practicamos lo suficiente, te puedo decir que el 80% de las preguntas que vas a escuchar en un proceso de entrevistas, ya tú las vas a tener en tu lista, y si no las tienes, van a ser muy similares.
Ahora, bien, ¿qué va a pasar con ese otro 20%?
“Elvis, no sé. ¡El otro 20% va a ser de preguntas que no sé!”.
Pues, no te preocupes, porque cuando tienes doscientas preguntas que has practicado, que has ensayado, que has escrito, las has practicado, al momento en que te lancen una pregunta que no has escuchado, vas a poder extraer o modificar alguna de las respuestas que ya tienes elaboradas para responder esa otra pregunta. Y si al final del día tienes una que no sabes, pues anótala en tu lista que ya sabes para las próximas entrevistas y así agregaste una más.
Definitivamente, hace una gran diferencia. Es del cielo a la tierra. Es como ir a presentar un examen cuando no sabemos nada o ir con la confianza de que “ya yo me sé las respuestas”.
Ahora bien, ¿cuál es la manera de fracasar con esta estrategia?
Obviamente, no hacerlo. Yo sé que toma trabajo buscar 200 preguntas. Yo sé que toma trabajo empezar a redactar esas respuestas. Yo sé que toma trabajo empezar a practicar, idealmente frente al espejo, esas respuestas, pero ¿cuál es la alternativa?
Ciertamente, ese proceso es un poco doloroso, un poco difícil, pero la alternativa es pasar meses y meses esperando a tener una oferta laboral, un nuevo trabajo. Eso es mucho más doloroso que practicar y encontrar esas 200 respuestas.
Asimismo, puede ser que se te dé la oportunidad y llegue el trabajo de tus sueños, y por el hecho de no tener esas preguntas y esas respuestas desarrolladas puedas perder la oportunidad de tu vida.
No vale la pena.
Así que definitivamente bien vale la pena invertir el tiempo en preparar todas estas preguntas y respuestas. Y lo más importante es esto: los candidatos que van a ir a competir contigo en ese proceso no van a hacer ese tipo de preparación, no van a escoger esas 200 preguntas, esas 200 respuestas. No se van a tomar el tiempo. Así, estás llevando a la entrevista una ventaja competitiva.
Hay otro factor que tienes que tener en cuenta.
Yo he visto muchísimas personas que tienen unas calificaciones excelentes para obtener el trabajo, pero cuando van a la entrevista no saben cómo proyectar, cómo presentar esas cualidades.
Así que en el caso incluso donde tus cualificaciones son menores a las de otros, tu experiencia sea menor, es irrelevante porque el trabajo se gana es en las entrevistas. Así que mantén eso presente: los otros candidatos pueden tener mejores credenciales, pueden tener más experiencia, pero si tú haces una presentación más sólida, con más confianza, más convincente, vas a poder ganar ese trabajo, vas a poder recibir esa oferta de trabajo antes que las personas que tienen esas altas calificaciones, pero que no saben cómo hacer una excelente presentación en el momento de la entrevista.
Así que te dejo esa poderosa asignación que te va a dar esa ventaja competitiva.
Cómo elevar tu estado mental para la entrevista
En este video te voy a compartir una técnica secreta que prácticamente nadie sabe, que puedes aplicar en el proceso de las entrevistas, que te va a ayudar a mitigar la ansiedad y el miedo y te va a dar una ventaja sobre los otros candidatos que estén aplicando.
Muy bien, así que ¿cuál es esa técnica secreta que nadie usa y que puede hacer una diferencia en el proceso de las entrevistas?
Pues se llaman las Poses de Poder.
Las poses de poder son una forma de utilizar nuestro cuerpo que va a activar nuestro poder interno. Esto no solamente lo utilizan los seres humanos; también los animales.
Por ejemplo, los animales cuando están en una situación donde quieren dejar en claro su poderío, donde quiere mostrar esa actitud alfa, lo que hacen es que expanden su cuerpo, muy al contrario a lo que la mayoría de las personas hacemos cuando vamos a un proceso de entrevistas, donde nos sentamos callados, encogemos nuestro cuerpo, empezamos a mirar nuestro teléfono móvil, empezamos a revisar nuestras notas, tratando de no llamar la atención.
Pues es todo lo contrario a lo que deberíamos estar haciendo. Muchos de los animales, si nos fijamos, en las aves, por ejemplo, que abren sus alas, las culebras también se expanden, algunos reptiles se expanden, el pavo real, etc., todos tratan de expandirse.
Pero esta explicación de las poses de poder también tiene su ciencia. Ha habido estudios que muestran los resultados de estas poses de poder, pero ¿cuáles son estas? Puedes ir a Google y buscar: “Poses de Poder” o “Power Poses” y ahí vas a ver algunos ejemplos. Una de las más comunes es la de pararse como Superman o la Mujer Maravilla, tal cual, ahí un par de minutos, vas a empezar a activar todos estos elementos de los que voy a estar hablando acerca de cuál es la ciencia que soporta, que realmente respalda esta idea de las poses de poder.
Hay estudios, por ejemplo, que se han hecho con las poses ganadoras. Cuando una persona gana, lo que hace es que levanta los brazos, levanta la cara y empieza a celebrar. Pues ha habido estudios que se han hecho con personas que han nacido ciegas, que nunca han visto a nadie haciendo este tipo de pose y cuando estas personas ganan en algo, hacen la misma pose: inmediatamente ponen su cuerpo, ponen sus brazos en posición de V, levantan el mentón y empiezan a celebrar.
Así que es muy importante poder entenderlo y poder implementarlo en los procesos de entrevistas.
Pero…
¿cómo lo podemos hacer?
Vamos a hablar acerca de esto, pero voy a hablar un poco también acerca de dos estudios que se han realizado. Uno de estos estudios fue hecho por la Universidad de Harvard donde les pidieron a los participantes mantener una pose de poder, tal cual como la Mujer Maravilla o Superman por solamente dos minutos. Lo que hicieron fue empezar a medir las respuestas hormonales de estas personas antes y después de estos dos minutos de pose de poder. Encontraron que los niveles de testosterona se elevaron en solo dos minutos.
También incrementaron su tolerancia al riesgo y redujeron los niveles de cortisol, que son las hormonas del estrés, en un 25%. Solamente con dos minutos haciendo esa pose.
Pero incluso hubo otro estudio que es más relevante a lo que estamos hablando. En este estudio se le pidió a un grupo de personas hacer una pose de poder y a otro grupo que no hiciera absolutamente nada y los llevaron a todos a una entrevista sumamente estresante por cinco minutos. Escogieron unos jueces que no sabían quiénes eran los que estaban utilizando anteriormente la pose de poder y quienes sí.
Lo interesante fue que los jueces escogieron una y otra vez a aquellas personas que mantuvieron la pose de poder antes de entrar al proceso de entrevistas y también calificaron a estas personas como más positivas.
Ahora bien,
¿cómo lo podemos implementarlo en el proceso de entrevistas?
Lo primero que les voy a recomendar es que lleguen a las entrevistas por lo menos una hora antes, con suficiente tiempo.
¿Por qué?
Porque si sucede algo, si hay tráfico, si tenemos algún contratiempo, lo menos que vamos a querer es añadir más estrés en nuestro cuerpo. Ya el proceso de entrevistas de por sí es un poco estresante. No necesitamos añadirle más leña al fuego. Así que llegar con suficiente tiempo, reconocer cuál es la mejor ruta, cómo es el tráfico en el sitio, en el lugar donde se va a hacer la entrevista, a la hora que se va a hacer la entrevista, en el día que se va a hacer la entrevista, de modo que puedas planificar y llegar allí con suficiente antelación y no experimentar ese estrés adicional.
Una vez ahí, algo que yo siempre hacía era irme al baño y poner en mi cuerpo esa pose de Poder, esa poder de poder ganadora o como Superman, cualquier pose que te haga sentir poderoso, poderosa, en ese momento.
Ahora bien, vamos a aplicarle algo “de picante” a esta técnica, vamos a combinarla con otra técnica que es muy poderosa: quiero que pienses acerca de tres o cuatro canciones que te hagan sentir poderoso. Todos tenemos alguna canción que cuando la oímos nos sentimos como Superman, nos sentimos con poder, etc. Tú sabes cuáles son esas canciones.
Yo utilizo generalmente las canciones del grupo Survivor, que hacían las canciones de las películas de Rocky, como “Ojo de tigre”, etc. Cuando las pongo me siento en ese estado mental, como Superman. Entonces, lo que vas a hacer es que te vas a ir a un sitio donde tengas privacidad y vas a aplicar esa pose de poder, vas a ponerte los audífonos (asegúrate de que los las puedas escuchar a través de tu teléfono móvil incluso si no tienes cobertura, así que asegúrate de descargarientras mantienes la pose de poder.
Mientras lo haces, también nuestra mente va a estar un poco agitada, va a tratar de divagar. La idea es que empieces a visualizar el proceso de la entrevista. Que te veas entrando a la entrevista con poder, te veas respondiendo todas las preguntas de forma excelente y, muy importante, que veas el resultado final, te veas estrechando la mano de la persona que está contratándote, te veas recibiendo la oferta de trabajo y celebres, pongas la celebración en tu cuerpo.
Hazlo una y otra vez, escucha las canciones, mantén la pose de poder y visualízate una y otra vez mientras esperas para entrar al momento de la entrevista.
Seguramente vas a tener que llegar unos minutos antes, tal vez cinco, diez minutos antes, te vas a tener que sentar, pues obviamente no vas a esperar hasta el último minuto en el baño. Trata de que al sentarte no entres en una pose de bajo poder, como las que estábamos haciendo, donde te encoges.
Todo lo contrario: trata de sentarte expandiendo tu pecho, levantando un poco el mentón, y muy pero muy importante, si puedes, sigue escuchando las canciones mientras esperas, sigue visualizando a pesar de que estás ahí, sigue recreando, sigue celebrando en tu mente. Pon el éxito en tu mente. Te vas a dar cuenta de que al momento de la entrevista vas a llegar en una superversión de ti, con un estado de conciencia muchísimo más elevado que como entrarías sin aplicar esta técnica.
Y lo importante es que los otros candidatos no van a estar aplicando esta técnica, así que te da también esa ventaja competitiva. Así que ve y aplícalo. Me gustaría escuchar un comentario: qué piensas acerca de estas técnicas.
Y muy importante: me encantaría escuchar tu historia de éxito.
Para cerrar esta serie acerca de cómo lograr la maestría en las entrevistas, cómo vencer el miedo, cómo vencer la ansiedad al momento de ir a una entrevista, hay un aspecto que yo quisiera compartirles y es el hecho de que muchas personas van a las entrevistas teniendo la expectativa de que tienen que hacer una entrevista perfecta y de que no se pueden equivocar.
Y eso es una expectativa que no solo es un poco irreal, sino que nos aumenta los niveles de ansiedad. Tenemos que entender dos conceptos que es muy importante tener presente a la hora de dejar a un lado esta expectativa de tener que ser perfecto en la entrevista.
Número uno: algo de lo que yo me he dado cuenta en mi experiencia al hacer coach con otras personas, que también han querido buscar un nuevo trabajo o conseguir el trabajo de sus sueños, es que cuando algo es para ti, no hay nadie que te lo quite. Es algo que tenemos que tener presente. Si ese trabajo es para ti, no va a haber nada ni nadie que se vaya a poner en tu camino. Hablo por experiencia propia.
Recuerdo una entrevista en particular donde mi ejecución fue perfecta. Es como cuando los gimnastas les dan esa puntuación de 10. Es raro tener una entrevista donde no nos equivocamos y yo recuerdo que el gerente regional me dijo:
“Tú eres el hombre. No hay nadie más que tú. Tienes todo lo que se necesita. Nos encanta que vayas a ser parte de la compañía. Solamente tengo que entrevistar a otra persona el día de mañana, pero honestamente es relleno porque yo sé que tú eres la persona que va a tener esa posición. Así que de verdad nos agrada mucho que estés con nosotros.
Así que listo”. “Ok. Perfecto”…
Aun estoy esperando la llamada… eso fue hace años…
Pero también he tenido entrevistas donde me he equivocado una y otra vez, ¡y he recibido la oferta de trabajo! Así que ten presente que si el trabajo es para ti, no importa cuántos errores vas a cometer: el trabajo va a ser tuyo.
Lo importante que también tienes que mantener presente es que tus competidores, los otros candidatos, también están cometiendo errores. Así que no te preocupes. El hecho de creer que vamos a tener una entrevista perfecta sencillamente aumenta los niveles de ansiedad, así que tenemos que permitir cierta imperfección en el proceso.
De igual forma, no se trata de si cometemos errores o no. Se trata de cómo nos desempeñamos en total, cómo decir:
“Ok. Me equivoqué en una pregunta.
Voy a hacerlo mejor en la próxima.
Es solo un pequeño error, puedo enmendarlo. Lo he hecho lo suficientemente bien hasta ahora.
No quedarnos pensando en el error. Hay que dejarlo pasar, saber que podemos recibir la oferta así nos hayamos equivocado muchísimas veces en el proceso.
Además, tenemos que verlo como un proceso de aprendizaje. Hay personas que me dicen: “Elvis, me están llamando a esta entrevista, pero yo sé que me están llamando solamente porque voy de relleno. La posición no existe o ya se la dieron a alguien de la compañía”.
Pues ve a la entrevista, porque no sabes con qué te vas a enfrentar.
Te voy a compartir dos cosas.
La primera: recuerdo que estuve en una situación de ese tipo. Yo fui a la entrevista y había dos gerentes. Muchas compañías a veces ponen a dos gerentes para tener más de una opinión y recuerdo que tenía al gerente de Miami, que era el que estaba contratando, y la gerente de West Palm Beach.
El gerente de Miami al final de la entrevista me es muy honesto y me dice: “Elvis, realmente ya esta posición se la hemos dado a una persona que ya viene de la compañía. Vamos a promover a alguien directamente. Pero te queremos comentar algo” y empieza a hablar la gerente de West Palm Beach, y ella me dice: “Mira, yo de verdad vine a apoyar a mi compañero, pero me ha gustado muchísimo tu perfil.
¿Tú estarías dispuesto a mudarte a West Palm Beach?, porque me encantaría tenerte en mi equipo…”.
Al final en esa ocasión le dije que no porque realmente no me quería mudar. No estaba tan apurado. Pero es una muestra de cuán importante es ir. No sabemos si esta compañía va a expandir operaciones, no sabemos si se va a abrir otra vacante. Sí, a lo mejor ya tienen a esa persona, pero tú hiciste un trabajo tan excelente que no sabemos qué impacto puedes generar. A lo mejor terminan abriendo una posición diferente para ti.
Lo otro es: supongamos que hay una sola posición y sí eres el relleno.
La experiencia, la oportunidad de ir y practicar lo que hablamos en el video I, en un escenario real, es invaluable.
Es más, ¡yo pagaría solamente por tener la oportunidad de ir!
Que no me contraten, pero el poder practicar con alguien que en verdad está buscando reclutar para esa posición, esa experiencia es invaluable porque vas a cometer errores, vas a escuchar preguntas que a lo mejor no has escuchado, vas a poder aprender, vas a poder corregir para poder pulir tus habilidades dentro de las entrevistas.
Así que no importa si esa posición está o no está. Tú función es ir ahí y hacer el mejor trabajo posible, tener el mejor desempeño posible con errores, sin errores, porque esa experiencia que vas a adquirir durante ese proceso de entrevistas es invaluable y te va a preparar para la próxima oportunidad donde sí vas a conseguir el trabajo de tus sueños.
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