Descubre algo que Es muy Fácil, Pero Nadie lo Sabe: Cómo Mejorar tu Vida Usando el 100% de tu Cerebro. Dr. Bruce Lipton.
No te quedes atascado en la idea de que estás usando solo el 10% de tu cerebro. Esa historia es falsa. Puedes usar el 100%. Hay muchas maneras diferentes de involucrar y activar todo el cerebro.
De la forma en que vivimos en nuestra conciencia, ¿podrías distinguir una manifestación consciente de una real? ¿Lo que viste fue verdaderamente real o algo que creaste en tu cabeza?
Biológicamente, nunca sabrás la diferencia. Todos podríamos estar sentados aquí ahora mismo, pero en realidad esto fue hace mucho tiempo. Ni siquiera estamos aquí. Esto ni siquiera es el momento real. ¿Cómo saberlo?
Bueno, dirás que lo ves y lo sientes, lo hueles y lo tocas. Sí, pero ahora vete a dormir y en tu estado de sueño tu biología será activada por tu cerebro. Tu sistema nervioso sensorial experimentará lo que hiciste durante el día.
Entonces, en el estado de sueño, ¿podrías decir si lo que experimentas es real o un sueño? No lo puedes decir cuando estás dormido. ¡Ese es el enigma de la Física Cuántica! ¡No sabemos dónde estamos! Nos contentamos con elegir este probable momento y estar en él al mismo tiempo.
Sin embargo, de acuerdo con la Mecánica Cuántica, podríamos tener otros probables momentos instantáneos justo ahora. Donde ni siquiera estaríamos en esta realidad, sino en otra. ¿En qué realidad estamos?
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Dirías: “Bueno, en esta, que es la realidad que estoy sintiendo biológicamente”. ¿Pero la estás sintiendo biológicamente en tu sueño o en la vida real? La respuesta es que no lo sabes.
Esa es la parte más emocionante, porque deja abierta la comprensión de cómo retroceder y cambiar el pasado. O desde el momento actual cambiar el futuro. Podemos hacer mucho más que solo seguir nuestras narices durante el próximo minuto. ¡Podemos reescribir toda la historia una y otra vez!
Todos hemos oído que estamos usando solamente el 10% de nuestro cerebro. Si pudiéramos usar el resto, seríamos superinteligentes. ¡Pero eso es todo lo que usamos!
En primer lugar, ¿de dónde salió esa cantidad, 10%? Hace mucho tiempo, cuando el cuerpo se unió a través de la comprensión de la histología y las células que componen los órganos.
Un estudio del cerebro reveló un hecho muy importante y es que solo 10% del cerebro está compuesto de neuronas. El 90% de las otras células cerebrales no son neuronas, pero las llamaron tejido de sostén o conectivo y les dieron el nombre de células gliales.
Lo que es realmente interesante de esto es que en el principio de la doctrina de las neuronas se creía que estas eran las células funcionales del cerebro y las gliales eran apenas un soporte. Por definición, esto significa que solo estás usando 10% de tu cerebro porque ese es el porcentaje de neuronas que lo componen.
Durante mucho tiempo se pensó que las células gliales eran solo como un tejido de conexión, un soporte físico y nutricional de las neuronas. En las últimas décadas, sin embargo, lo que se encontró fue lo siguiente: hay un malentendido con respecto a las células gliales.
Ellas son mucho más importantes en la función neuronal que un mero soporte físico. Pueden inhibir o activar las neuronas, se conectan a ellas y pueden controlar su actividad. Así que de repente estas células gliales, que antes se consideraban como células pasivas en el cerebro, resultaron ser bastante funcionales al integrar la naturaleza de cómo este funciona.
Una manera de verlo, en una simple analogía, es considerar que las neuronas son los sustantivos en una oración y las células gliales son los verbos, los adjetivos, los adverbios modificadores de esos sustantivos. Así que las células gliales complementan la imagen. Las neuronas son como las figuras de palo, pero cuando añades las células gliales se complementa el dibujo y aparece el personaje.
Las células gliales se convierten en una parte integrada y muy funcional de toda la actividad neuronal, por lo que el concepto en la teoría de las neuronas que dice que solo ellas están involucradas con el funcionamiento del sistema nervioso está incompleto, porque las células gliales participan también.
Entonces ahora no estamos tratando con el 10% del cerebro. Estamos lidiando con el 100%. Sí, tienes acceso al 100% de tu cerebro todo el tiempo. ¿Eso significa en realidad que estamos usándolo todo al mismo tiempo?
La respuesta es no, porque lo que encontramos cuando comenzamos a vivir en patrones y con hábitos es que activamos ciertas vías de acceso o caminos neuronales. Esas son vías habituales. Como resultado, son los caminos a los que les damos preferencia en nuestra vida cotidiana.
Sin embargo, si puedes involucrar toda la actividad cerebral, puedes mejorar tu conciencia y tu habilidad para controlar tu vida. Básicamente significa que podemos convertirnos en un “cerebro completo” cuando empezamos a pensar holísticamente, de manera integral, en vez de solo ejecutar programas recurrentes una y otra vez por las mismas vías habituales.
Estamos empezando a descubrir que hay muchas formas diferentes de participar en la activación de todo el cerebro. Algunas involucran simples ejercicios como la llamada “gimnasia cerebral”. La gimnasia cerebral es una actividad muy interesante para la integración del cuerpo y el sistema nervioso.
Mi mano derecha está controlada por mi hemisferio izquierdo. Mi mando izquierda está controlada por mi hemisferio derecho. Pero aquí hay un aspecto interesante: si mi mano derecha, controlada por mi hemisferio izquierdo, cruza la línea media, entonces, simultáneamente es captada por el otro hemisferio porque ahora también está en ese territorio.
Entonces, cuando cruzas los brazos y las piernas, lo que estás haciendo es permitir que los hemisferios derecho e izquierdo trabajen juntos en armonía.
Cuando estamos activando una sincronización del cerebro donde los hemisferios derecho e izquierdo se combinan simultáneamente, se activa algo parecido al superaprendizaje, en el que ambos hemisferios trabajan juntos. Tenemos así características muy superiores de función neuronal.
Sin embargo, después de los siete u ocho años comenzamos a expresar lo que se llama el dominio cerebral, lo que quiere decir que durante el día no tenemos sincronización de ambos hemisferios, sino que es como si hubiera una especie de onda. A veces estamos más en el hemisferio izquierdo y a veces más en el derecho, luego pasa a la izquierda y vuelve a la derecha y así.
Es como que manejáramos bicicleta con un hemisferio a la vez.
Esto se llama dominio del cerebro, donde un hemisferio es temporalmente dominante sobre el otro.
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Integrar nuestras vidas en el dominio del cerebro es muy difícil por una simple razón: se ha sugerido que nuestro hemisferio izquierdo se basa en la lógica y en los detalles. El hemisferio derecho, por su parte, está realmente asociado con emociones y plenitud.
Esto es muy importante porque si solo estás mirando con el hemisferio izquierdo, entonces todas las cosas lógicas tienen sentido, pero sin ningún componente emocional, y a la inversa, si estás en el hemisferio derecho, te vinculas emocionalmente, pero la lógica se desvanece.
Entonces, esto nos ocurre desde la época en que teníamos ocho años hasta nuestra vida adulta. Pero si puedes conseguir que ambos hemisferios estén sincronizados, entonces estarás involucrando la lógica y las emociones al mismo tiempo.
Eso abre una ventana de oportunidades de superaprendizaje donde puedes descargar información realmente rápido, pero también abre una amplia gama de pensamiento que incluye un componente emocional y un componente intelectual, que es necesario para constituir una imagen completa.
Entonces, si estás operando desde el dominio del cerebro, en realidad estás apagando un componente de tu sistema nervioso en ese momento. Pero si haces un ejercicio como la gimnasia cerebral, en la que estás involucrando el cruce de brazos y piernas, lo que haces es empezar a integrar ambos hemisferios.
Eso es muy interesante, porque cuando sincronizamos los hemisferios estamos más tranquilos, integrados y capaces de expresar funciones neurológicas que nos apoyan plenamente. Por eso, cuando vamos a casa y nos relajamos por la noche, encontramos que cruzamos los tobillos cuando nos sentamos en el sillón y ni siquiera nos damos cuentas.
En realidad estamos involucrando un proceso cerebral completo.
Entonces, si estás estresado, por ejemplo, en el día, o simplemente quieres relajarte cuando vas a casa por la noche, cruza tus brazos y piernas para que vincules ambos hemisferios, lo que calma el sistema y compromete todo un proceso cerebral. Ahí te vuelves mucho más práctico en tu estado de relajación.
Si estás pasando por un día difícil, tómate un momento y cruza los brazos y las piernas. Mantenlos juntos y espera unos tres o cuatro minutos. Empezarás a sentir que sobreviene la calma y con ella tus funciones neuronales mejorarán.
Cuando empezamos a operar a partir de patrones que se repiten todos los días, empezamos a expresar vías de enlaces o caminos específicos que se reutilizan una y otra vez. Como resultado, estamos apagando una gran cantidad de funciones del cerebro y simplemente vamos a través del hábito de esos patrones que repetimos.
Básicamente, lo que realmente debes entender es que podemos usar 100% del cerebro, pero si ejecutamos los mismos patrones una y otra vez, no estaremos usando ese 100%.
Así que me gustaría sugerirte que una vez que empieces a reconocer que puedes lograr una sincronización de hemisferios, en la que puedes hacer que se relacionen y permanezcan conscientes, estarás utilizando el 100% de tu actividad cerebral.
Cuando haces esto, también encontrarás que tu vida es más fácil, armoniosa y saludable porque cuando usas todo su sistema nervioso, este apoyará tu vida y mejorará tu crecimiento.
Esto es importante, así que no te atasques en la idea de que estás usando solo 10% de tu cerebro. Esa historia es falsa. Podemos usarlo todo y está disponible para nosotros.
Básicamente, todo lo que tienes que entender es esto: mantente consciente, atento y deja de reproducir los mismos patrones una y otra vez, porque eso abre una oportunidad para crear un nuevo comportamiento.
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