Descúbrelo. ¡COMPROBADO! Haz Este TRUCO y Usarás Todo el PODER de tu Sistema Nervioso. Bruce Lipton en Español.
Esta vez quiero centrarme en uno de esos mitos urbanos, en particular la creencia de que solo funcionamos con el 10% de nuestro cerebro.
Sí, todos hemos oído que nada más usamos el 10% de nuestro cerebro y que si fuésemos capaces de usar todo el resto, seríamos súper inteligentes.
Pero, ¿es ese porcentaje todo el que usamos? En primer lugar, ¿de dónde viene ese número?
Hace mucho tiempo, cuando se estudió el cuerpo a través de la histología y de las células que componen los órganos, un estudio del cerebro reveló algo muy importante, y es el hecho de que solo el 10% del cerebro estaba formado por neuronas, que solamente ese 10% se compone de neuronas y que el resto de las células no eran neuronas, sino células conectivas de apoyo a las cuales se les dio el nombre de gliales.
Según esa “doctrina de la neurona”, las neuronas eran, pues, las células funcionales del cerebro y las gliales nada más les servían como una especie de tejido conectivo de apoyo físico y nutricional.
De allí surgió la teoría de que utilizamos el 10 % del cerebro.
Sin embargo, en las últimas décadas hemos descubierto que hay un malentendido sobre estas células y que son mucho más importantes para la función neuronal que el apoyo físico.
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Para entenderlo mejor, establezcamos una simple analogía con los elementos que componen una oración: las neuronas serían los sustantivos y las células gliales los verbos, adjetivos y adverbios modificadores de los sustantivos. Las células gliales son las que ayudan a complementar una pintura.
En un cuadro las neuronas son las siluetas humanas mientras que las células gliales completan el paisaje con la naturaleza, por lo que se convierten en una parte funcional e integral de toda la actividad neuronal.
Además, la doctrina de las neuranas dice que solo las neuronas están involucradas en el funcionamiento del sistema nervioso. Las células gliales también lo están. Por lo cual no estamos tratando solo con el 10% del cerebro, estamos tratando con el 100%.
Pero si me preguntan si tenemos acceso a ese 10%, la respuesta es no, porque lo que hemos empezado a descubrir es que cuando vivimos apegados a patrones y hábitos, apenas activamos ciertas vías neuronales habituales y, como resultado, son esas vías las que tienen preferencia en nuestra vida cotidiana.
Sin embargo, si puedes participar en la actividad de todo el cerebro puedes mejorar tu conciencia, tu conocimiento y la capacidad para controlar tu vida. Así que básicamente podemos convertirnos en un cerebro completo cuando empezamos a pensar de manera holística en lugar de jugar a los programas recurrentes que se reproducen una y otra vez y activan las mismas vías.
La relevancia es entonces que una vez que empezamos a participar en la actividad del cerebro completo mejoramos nuestra capacidad como seres humanos en este planeta.
Ahora estamos comenzando a descubrir que hay muchas maneras diferentes de participar y activar todo el cerebro, algunas de las cuales implican ejercicios simples como algo llamado “gimnasia cerebral”, un ejercicio muy interesante del cuerpo y la integración del sistema nervioso.
Mi mano derecha es controlada por mi hemisferio izquierdo y mi mano izquierda por el hemisferio derecho; pero aquí hay una historia interesante: si mi mano derecha controlada por el hemisferio izquierdo cruza la línea media, entonces es recogida por el otro hemisferio porque ahora está en ese territorio.
Así, cuando cruzas tus brazos y cruzas tus piernas, lo que estás haciendo es que causar que los hemisferios derecho e izquierdo trabajen juntos en armonía, simultáneamente. Esto activa un súper aprendizaje: con ambos hemisferios trabajando juntos, tenemos características mucho más superiores de la función neural.
Sin embargo, después de los siete u ocho años empezamos a manifestar la llamada “dominación del cerebro”, lo cual significa que durante el día no tenemos la sincronización de ambos hemisferios, es como una forma de onda, a veces estamos más en el hemisferio izquierdo, a veces más en el derecho, volvemos a la izquierda y volvemos a la derecha, de modo que estamos en un ciclo al través de un hemisferio a la vez.
Eso se llama la “dominación cerebral”, donde un hemisferio domina al otro.
La relevancia de eso consiste en hacer difícil la integración de nuestras vidas por la simple razón, como se ha sugerido, de que nuestro hemisferio izquierdo se basa en la lógica y los detalles y nuestro hemisferio derecho se asocia a las emociones y la integridad.
De modo que si solo miras con tu hemisferio izquierdo todas las cosas lógicas tienen sentido pero no tienen un componente emocional y, al revés, si estás en el hemisferio derecho estás emocionalmente atado pero la lógica desaparece. Bueno, esto nos pasa desde que tenemos ocho años hasta nuestra vida adulta.
Sin embargo, si logras que ambos hemisferios estén sincronizados, estén en sincronía, entonces estás involucrando la lógica y las emociones al mismo tiempo, lo que abre una ventana a oportunidades de súperaprendizaje donde puedes descargar información muy rápidamente, pero también abrir una amplia gama de pensamientos que incluye un componente emocional así como un componente intelectual, ambos necesarios para crear una imagen completa.
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Por eso es muy interesante cuando te vas a casa y te relajas por la noche; a veces te encuentras con los tobillos cruzados uno sobre el otro, sentado en tu silla, sin siquiera saber lo que estás haciendo; cuando cruzas los tobillos en realidad estás involucrando todo un proceso cerebral.
Si estás estresado durante el día, por ejemplo, o simplemente quieres relajarte cuando vuelves a casa por la noche, el cruzar los brazos y las piernas involucra a ambos hemisferios cerebrales implicando así todo el proceso cerebral por lo que tu relajación se vuelve más eficaz.
Así que si estás teniendo un momento difícil durante el día… tómate un momento y cruza los brazos y las piernas manteniéndolos juntos. Espera tres o cuatro minutos y empezarás a sentir una calma donde tus funciones neurológicas mejoran totalmente.
Cuando operamos a partir de patrones que se reutilizan una y otra vez, como resultado cerramos una gran parte del funcionamiento del cerebro. Así que básicamente lo que tienen que entender es que si empleamos los mismos patrones una y otra vez, no necesitamos usar el 100% del cerebro.
Una idea simple que me gusta sugerir es que una vez que empiezas a reconocer que puedes lograr que ambos hemisferios se involucren conscientemente juntos, estarás usando el 100% de tu actividad cerebral y encontrarás que tu vida es más fácil, más armoniosa y más saludable porque el uso de todo tu sistema nervioso te servirá de apoyo vital y mejorará tu crecimiento.
Así que no te quedes atascado en que solo estás usando el 10% de tu cerebro. Esa historia es falsa. Puedes usar el 100% y básicamente lo que tienes que entender es esto: mantente consciente, mantente atento y deja de reproducir los mismos patrones una y otra vez, propiciando así una oportunidad para crearte un nuevo comportamiento.
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